Estudiante de derecho y políticas, empezó a aprender japonés en la universidad. Viajó a Tokio becado en ICEX.
Adrián, Miguel y Borja nos hablan de sus experiencias como becarios ICEX en Japón:
Experiencia japonesa:
El año en la Embajada de España en Japón, sector agroalimentación, fue una experiencia inigualable y enormemente enriquecedora. Si de todo lo aprendido solo pudiera llevarme una idea sería la siguiente: la adaptación del producto español al consumidor japonés es clave de éxito. El salto cultural del producto puede ser tan largo que acabe transformado en otro nuevo, exclusivo para su venta en Japón, pero un buen socio japonés sabrá valorar este esfuerzo con mucha orientación, confianza y estabilidad a largo plazo.
Cosas como el corte de la carne en la bandeja del super o la variedad sabor matcha – Té verde – en productos que no imaginarías eran al principio una curiosidad cultural y, al cabo de unos meses, sencillamente, “¿Cómo iba a ser de otro modo en Japón?”.
Sobre mí:
Empecé a estudiar japonés en la universidad porque deseaba aprender un idioma poco habitual en España y por curiosidad ante el reto que suponen los kanjis. Por otro lado, a mitad de la carrera de derecho y políticas comprobé que la rama que más me interesaba era el comercio internacional de modo que antes de terminar sabía que quería optar a una beca ICEX y que mi primera opción de destino sería Japón, no solo por las oportunidades profesionales sino además con la expectativa de comprobar si era capaz de vivir en una gran megalópolis como Tokio y saber si la cultura y la sociedad japonesa son realmente como nos llegan a España.
Estudios: Derecho y Ciencias Políticas y de la Administración, Universidad Pablo de Olavide / Master Gestión Internacional de la Empresa, ICEX
Residencia: Madrid